En la imagen se observa, a la izquierda, una figura
con barba, considerada un dios, de Enkomi, Chipre, datada en el siglo XII
a.e.c. Se muestra armada con escudo redondo y lanza. Lleva un faldellín, tal
vez grebas y un casco con cuernos “shardana” (aunque también podría ser
ugarítico). Está sobre lo que se denomina un lingote de pellejo de buey. Además
de un guerrero parece ser un dios de los trabajadores del metal, cuyos talleres
se encontraron en las proximidades de los templos de Kition. A la derecha, otra
figura (pero cuatro siglos más reciente), de un guerrero de Sulcis, en Cerdeña.
Es uno de los numerosos ejemplos de figuras con escudos redondos, cascos con
cuernos, lanzas y a veces, espadas o arcos. Esta, además, porta grebas y
armadura. ¿Estaríamos aquí ante un vínculo con los “shardana”?. Diría que sí.
Los “shardana” se conocen en las fuentes como “atacantes” (en esa masa informe
de Pueblos del Mar), que luego se reconvierten en mercenarios y tropas de
guarniciones egipcias. Se destacaban como espléndidos guerreros con escudo y
espada. Probablemente procedían del norte de Siria. Tras el ataque al Egipto de
Ramsés III permanecieron un tiempo en Chipre. Desde allí, al menos una parte,
se trasladaron a la isla de Cerdeña (que inspira su nombre desde el siglo IX
a.e.c.) poco después de 1186 a.e.c., quizá en forma de varias expediciones más
o menos numerosas. Además, por otra parte, Cerdeña se conocía desde antiguo
como una isla rica en cobre y, por consiguiente, pudo estar involucrada en el
comercio de lingotes de piel de buey. El evidente parecido, tanto en las
vestimentas como en el armamento, entre los atacantes representados en Medinet
Habu y los bronces de dioses y guerreros sardos del siglo VIII a.e.c. no debe
pasar, creo, desapercibido.
Prof. Dr. Julio López Saco.
UCV-UCAB. FEIAP-UGR. UM. Septiembre, 2018
No hay comentarios:
Publicar un comentario